Personas y empresas que pidieron una reestructuración de créditos y se atrasaron en sus pagos contarán con una marca "suave" en las Sociedades de Información Crediticia, destacaron la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y la Comisión Nacional Bancario y de Valores (CNBV).

Juan Pablo Graf, titular de la CNBV, explicó que la marca suave, no es la marca tradicional de incumplimiento, sino una calificación que toma en cuenta las circunstancias de la pandemia.

Precisó que habrá tres casos: cuando no hayan tenido atrasos, no va haber marca.

Si tienen un atraso, pero no estaban en cartera vencida, tendrán esta marca suave.

Quienes estén en cartera vencida serán marcados de forma consecuente en los burós de crédito.

Dijo que "vemos más aumento en la morosidad a actividades económicas más afectadas por los efectos de la pandemia, comercio al por menor, turismo, restaurantes, la cartera de los bancos e intermediarios financieros dirigida a empresas de estos sectores podría ser los más afectas, a su vez los trabajadores de estas industrias podrían tener los mayores problemas para estar al tiempo en el pago de sus deudas".

Después de que más de ocho millones de créditos de personas y empresas fuesen reestructurados, el 17 por ciento de la cartera bancaria, ahora se tendrán que iniciar sus pagos.

La CNBV espera que sus medidas deriven en que las tasas de los créditos sean más bajas y cuenten con ampliaciones de plazos. Cada banco será libre de aplicar estas medidas.

Ambas instituciones anunciaron un nuevo paquete para restructuración de créditos que incentivará a los bancos absorber créditos y dar nuevos créditos.

Esto se realizará mediante la ampliación de los llamados "buffer de capital" hasta el 31 de diciembre, un mecanismo que permite utilizar el suplemento de conservación de capital, que sirve para que el financiamiento no se detenga y se continúe otorgando.

También se incentivará a los bancos a mantener el otorgamiento del crédito mediante una regulación que acepte menores reservas crediticias.