El secretario de Trabajo y Previsión Social, Marath Bolaños López, sostuvo que los cambios en el mundo laboral han permitido incidir en la reducción de la pobreza, y se estima que de los 5 millones de personas que dejaron la pobreza, al menos 3 millones lo hicieron derivado de la recuperación del valor real del salario mínimo, del aumento del salario promedio en el país, así como también del reparto de utilidades y otras medidas.

Ya pasó la etapa de entender las nuevas reglas, es hora de consolidar y desterrar viejos vicios, señala el secretario de Trabajo y Previsión Social, Marath Bolaños López, al inaugurar el Foro Nacional de Conciliación Laboral, donde estableció que justicia que no llega a tiempo, no es justicia.

El mundo del trabajo cambió con la reforma laboral de 2019, y ya pasamos lo más complejo, que era entender las nuevas reglas del juego, ahora toca el proceso de consolidación y ejercicio que nos corresponde a todas y todos los actores del mundo del trabajo, aseveró el secretario del Trabajo y Previsión Social.

Destacó que es hora de desarrollar una cultura de la adaptación, actuando de manera colaborativa, para seguir perfeccionando este nuevo modelo laboral, sobre todo en procesos apoyados con herramientas tecnológicas, que permitan hacer más accesible sus beneficios a toda la ciudadanía.

“Con la reforma a la Ley Federal del Trabajo, en mayo del 2019, la conciliación ahora es un elemento indispensable para la atención de los conflictos laborales. Tenemos cerca del 70% de eficiencia en estos procesos, pero no debemos de dar marcha atrás, debemos seguir combatiendo algunos de los vicios que nos dejaron del pasado, de los viejos procedimientos, y esta es una tarea que nos toca a todas y todos”, agregó.

Llamó a generar estrategias que permitan atender la incomparecencia de los actores en los procesos conciliatorios, para evitar que merme el espíritu de esta reforma. Para ello, reiteró, es necesario el diálogo permanente, el intercambio de experiencias y facilitación de la información, para tener mejores prácticas que permitan avanzar en la consolidación del modelo.

El objetivo siempre debe apuntar hacia la protección de las y los trabajadores buscando garantizar la justicia pronta, porque recordemos muy bien que: “Justicia que no llega a tiempo, no es justicia”, expresó.