René Sánchez Juárez
Se llevó a cabo el Consejo Nacional de Morena con el objetivo de marcar las reglas para los aspirantes a suceder al presidente López Obrador en la presidencia para las elecciones del próximo año. El presidente del partido Mario Delgado declaraba la semana pasada después de conocer los resultados de las elecciones de Coahuila y el Estado de México, que el 2024 comenzaba el siguiente lunes.
El pasado 6 de junio el todavía canciller, Marcelo Ebrard, anunciaba su renuncia a la Secretaría de Relaciones Exteriores para el 12 de junio, con la intención de buscar la nominación de su partido para la presidencia de la república en 2024, con lo que presionaba a sus compañeros del gabinete, legisladores y gobernantes a hacer lo propio. Y es que todos seguían haciendo promoción utilizando de forma indirecta su cargo.
Así que este domingo se pusieron de acuerdo en el método para designar a quien encabezará la Coordinación de Defensa de la Transformación, es decir, la candidatura de Morena a la presidencia para el próximo año.
Los puntos más sobresalientes son: la Coordinación será determinada a través del método de encuesta; el Consejo Nacional enviará a 4 personas que cubren el perfil, Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Adán Augusto López y Ricardo Monreal; así como de dos perfiles de sus partidos aliados, por el PT Gerardo Fernández Noroña y del PVEM Manuel Velasco. Cada uno de los 4 perfiles de Morena propondrán 2 casa encuestadoras, así como el propio Consejo, para que sean 5 encuestadoras las que hagan el levantamiento
Del 12 al 16 de junio, se hará el registro de los aspirantes, así como cumplir con los requisitos que es el haber dejado su cargo público; del 19 de junio al 27 de agosto, poco más de 2 meses, los candidatos harán recorridos por el país; del 28 de agosto al 3 de septiembre se levantará la encuesta por la Comisión y las empresas seleccionadas con representantes de los aspirantes; finalmente el 6 de septiembre se dará a conocer al representante de la Coordinación de Defensa de la Transformación.
En 2018 se llevó a cabo un proceso similar para elegir al candidato, en el que López Obrador obtuvo la ventaja sobre Ebrard y se hizo de la candidatura de Morena, en esta ocasión hay más perfiles competitivos para representar al partido del presidente.
El piso parejo que hoy están tratando de plantear para los seis aspirantes parece adecuado, deberán ser austeros, no realizar debates o agresiones entre ellos mismos, (como lo sucedido con Lilly Téllez y Santiago Creel); curiosamente deberán evitar los medios que son considerados conservadores. No deberán involucrarse con gobernantes, miembros del gabinete o legisladores actuales de cualquier forma.
Esta forma de elecciones primarias pone al centro las propuestas de los aspirantes, sin ventajas visibles, más que las propias de su personalidad y liderazgo.
Por las encuestas publicadas, vemos a dos claros perfiles con ventaja, Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard; pero con dos meses de recorrido los escenarios aún pueden cambiar.
