Acuerdo México-EEUU ubicaría en 2.4 millones exportaciones de vehículos

Lo que se desconoce entorno al nuevo acuerdo comercial México-Estados Unidos mantiene un escenario de incertidumbre y genera dudas, no obstante se mantiene el entendido que fue la mejor negociación posible al favorecer a sectores como el automotriz que mantendría márgenes de exportación de 2.4 millones de vehículos anuales sin aranceles hasta 2022 de cumplir los nuevos requerimientos.

Así lo plantearon analistas de BBVA Bancomer en su análisis económico en torno al acuerdo comercial, México y Estados Unidos en el cual exponen que las partes llegaron a un entendimiento para la firma de una carta paralela que garantiza una cuota de exportación de unidades de vehículos ligeros libre de arancel que se activaría únicamente en el escenario en el que el gobierno norteamericano imponga aranceles a las importaciones del sector automotriz provenientes de cualquier parte del mundo por motivos de seguridad nacional (reglas 232).

Así, se sabe de la existencia de este “seguro” que indudablemente es positivo dada su naturaleza, permite una cuota importante de exportaciones de autos (aparentemente significativamente por encima de la actual) que estaría exenta de un posible arancel de 25 por ciento que presumiblemente podría imponer Estados Unidos.

Ello “blindaría” al sector mexicano de dicho arancel, aumentando en términos relativos la ventaja competitiva de dicho sector y, por ende, se volvería más atractivo a las inversiones mientras permanezca vigente dicho arancel potencial.

No obstante, no se conoce con certeza la cuota y ese dato es necesario para valorar qué tan positiva es dicha carta porque en caso de que efectivamente fuera elevada, podría incluso aumentar los incentivos para invertir en el sector en México en el corto plazo, refiere el documento elaborado por Carlos Serrano, Javier Amador, Iván Martínez, Arnulfo Rodríguez y Saidé Salazar.

En torno a lo “negativo” del acuerdo, refieren que de acuerdo a algunas versiones periodísticas, Estados Unidos se reservó el derecho de modificar los aranceles de nación más favorecida (NMF) para el sector automotriz.

Estos actualmente son 2.5% para vehículos ligeros y 25% para vehículos de carga.

En este tema, en el que no hay certidumbre, está la clave para valorar el nuevo acuerdo. Si efectivamente Estados Unidos puede modificarlo y llegara a aumentarlo significativamente, todo lo positivo acordado dejaría de serlo y se perderían las ventajas actuales con el TLCAN y las que parecen más probables con el nuevo acuerdo, alertan los analistas de BBVA.

Las modificaciones más relevantes con respecto al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) involucran nuevas reglas y cláusulas que deberán cumplir las exportaciones de vehículos ligeros a Estados para gozar de un arancel cero, cuyo efecto sobre la competitividad dependerá no solo del cumplimiento de los nuevos umbrales de contenido regional y producción en regiones de altos salarios, sino de la continuidad del arancel NMF de Estados Unidos en este segmento.

 

El análisis apunta que a las nuevas disposiciones en el sector automotriz se suma la definición de una vigencia de 16 años del acuerdo, con revisiones cada seis y posible extensión por 16 años más en cada revisión.

 

Esta nueva vigencia si bien no es indefinida como sería deseable, permitió destrabar la negociación por la intención de Estados Unido durante todo el proceso de incluir la cláusula Sunset que proponía una terminación automática del tratado a los cinco años si las partes no acordaban extenderlo.

 

La nueva cláusula de vigencia no implica una terminación automática a los seis años, pues, en caso de que llegado este momento no acordaran extenderlo por otros 16, negociarían cada año para intentar alcanzar un acuerdo que permitiera extenderlo por ese periodo de tiempo.

 

Además, el acuerdo entre México y Estados Unidos no contempla el capítulo 19 del anterior tratado (sobre resolución de controversias en paneles internacionales), no obstante, ello no implica una eliminación de dicho capítulo, pues simplemente se dejó que este tema se retomara en las negociaciones con Canadá que ya reiniciaron.

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