Tras el anuncio del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de imponer nuevos aranceles a productos chinos por valor de 200 mil millones de dólares, China se verá obligada a tomar medidas de represalia de manera recíproca", indicó el ministerio de Comercio.

Esta medida se toma para proteger sus derechos e intereses legítimos, así como el orden mundial del libre comercio.

Por su parte, el secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross, dijo que depende de China tomar acciones para sostener negociaciones comerciales.

"Lo que proponemos es tener negociaciones constructivas con China para resolver problemas fundamentales. Así que el tema de si o cuándo sostendremos una discusión, crucialmente, depende de ellos", dijo Ross en una entrevista televisiva.

Trump había advertido a los dirigentes chinos a no reaccionar. "Si China toma medidas de represalia contra nuestros agricultores o contra otras industrias, vamos a seguir inmediatamente con la fase tres, con aranceles en aproximadamente 267 mil millones de dólares de importaciones adicionales", advirtió.

Los nuevos aranceles anunciados por el gobierno estadunidense entrarán en vigor el 24 de septiembre.