El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, afirmó que frente a la caída de los precios del petróleo a niveles por debajo de cero, que hay recursos económicos y materiales suficientes de que echar mano frente a la crisis, porqué hay las reservas suficientes y se van a ajustar gastos, sin despedir a trabajadores al servicio del estado.

La crisis del petróleo es una crisis del modelo neoliberal. Nosotros ya lo sabíamos, aseveró.

Dijo que la caída en el precio del petróleo “no nos afecta tanto”, derivado de la inversión que ha realizado su gobierno en la perforación de nuevos pozos.

En conferencia de prensa, explicó que ello permitirá “cerrar válvulas”, lo que no hubiese sido posible en campos maduros.

“Se trabajó en campos nuevos, tenemos pozos nuevos, y ahora que no tiene valor el petróleo, le podemos cerrar las válvulas y no pierden presión. Si no hubiésemos perforado nuevos pozos estaríamos produciendo menos y además produciendo en campos maduros en donde no se puede hacer esa operación de cerrar válvulas, porque se cierra y lleva tiempo por falta de presión de los pozos, volver a reactivarlos y sacar petróleo, entonces ahora es cerrar, y mantener nuestra producción básica para las refinerías hasta que mejore el precio del crudo”.

Con la rehabilitación de las refinerías, el procesamiento del crudo ya se había incrementado: “Ayer ya procesamos en nuestras refinerías 800 mil barriles de petróleo, del millón 700 mil que producimos, casi la mitad, en mayo vamos a estar procesando un millón de barriles”, presumió.

Sostuvo que podrá darse una sustitución de importaciones de combustibles: “Podremos estar produciendo gasolinas en México y dejar de comprarlas en el extranjero, y esto nos ayuda a atemperar la crisis por el desplome en los precios del petróleo crudo”.