El titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) Carlos Urzúa Macías, informó que Banobras es el adquiriente del avión presidencial, la secretaría de Hacienda es la arrendataria, y el usuario final es la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) a través de la Fuerza Aérea Mexicana.
Previo a su salida rumbo al Aeropuerto de Logística del Sur de California, en Estados Unidos, identificado por la empresa fabricante, Boeing, como el hangar más idóneo para su preservación y resguardo hasta que sea vendido, dijo que además de la enajenación del avión presidencial Boeing 787-José María Morelos y Pavón, el gobierno federal también venderá 60 aviones y 70 helicópteros.
El proceso de venta es con el propósito de honrar el compromiso de austeridad hecho en campaña por el presidente Andrés Manuel López Obrador,
En el Hangar Presidencial, el director general del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras) Jorge Mendoza, dio a conocer los detalles de la venta del avión presidencial, en compañía de Urzúa Macías y del vocero presidencial, Jesús Ramírez Cuevas.
Adelantó que el secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, dará a conocer muy pronto la puesta en a venta de unos 60 aviones y 70 helicópteros que pertenecen al gobierno federal, una vez que se decida cuáles se van a enajenar
A su vez, el director general de Banobras informó que, dando cumplimiento a los compromisos asumidos por la nueva administración en materia de austeridad, y atendiendo a las instrucciones del presidente López Obrador, “hoy se da el primer paso rumbo a la enajenación del avión presidencial, el cual abandonará el país este lunes".
Puntualizó que el Estado mexicano adquirió la aeronave en noviembre de 2012 mediante un contrato de arrendamiento financiero que suscrito por la SHCP como arrendataria, Banobras como adquirente y la Secretaría de la Defensa como usuario final.
Mendoza indico que la aeronave se utilizó para transportar al titular del Poder Ejecutivo Federal desde el 3 de febrero de 2016; tiene una longitud de 57 metros y una capacidad máxima de 80 pasajeros.
Señaló que fue usado durante dos años 10 meses para realizar un total de 214 operaciones, recorriendo una distancia superior de 600 mil kilómetros.
Asimismo, se emprenden acciones para la enajenación de la aeronave, garantizando en todo momento las mejores condiciones en su proceso de venta y el uso eficiente de los recursos públicos, expresó.
Precisó que a partir de hoy, las autoridades federales informarán de manera puntual los avances y resultados de este proceso, así como lo relacionado con el mecanismo de enajenación de la aeronave.
Afirmó que está en su interés asegurar las mejores condiciones en la transacción, al tiempo que se da cumplimiento a las políticas de autoridad planteadas por el Presidente de la República.
