Las remesas concluyeron una racha alcista de 46 meses consecutivos, aunado a que el tipo de cambio jugo en negativo para las familias de los migrantes, conforme el Observatorio Migración y Remesas de BBVA Research.
Señaló que además de la caída en dólares registrada en las remesas y el factor inflacionario (4.4%), se debe considerar que marzo fue uno de los meses en el que el precio del dólar estadounidense cayó por debajo de los 17 pesos, lo cual se traduce en menos pesos al momento del cobro.
Así, en marzo de 2024, con un tipo de cambio promedio de 16.84 pesos por dólar, México recibió cerca de 84 mil 600 millones de pesos por remesas, lo que equivale a una contracción de 15.2% en términos reales en los ingresos por este concepto para los hogares receptores.
El Banco de México informó que ingresaron a México 5,021 millones de dólares por concepto de remesas familiares durante el mes de marzo de este año, lo que representa una caída de 3.3% en comparación al mismo mes del año anterior.
De esta manera, las remesas culminan una racha de 46 meses consecutivos con crecimiento, que duró entre mayo de 2020 hasta febrero de 2024.
Durante este periodo de casi 4 años, las remesas aumentaron en términos anualizados de 38 mil 800 a 63 mil 600 millones de dólares, lo que equivale a un crecimiento total de 64.1 por ciento en estos 46 meses.
El analista de BBVA Research, Juan José Li Ng, apuntó que México no fue el único país de la región en el cual se contrajeron durante marzo.
Durante ese mes, las remesas a El Salvador cayeron 4.9% y a Honduras disminuyeron 4.6%. También se observa que las remesas a Guatemala, Nicaragua, República Dominicana y Colombia se desaceleraron en marzo, en comparación a lo que recibieron en los meses de enero y febrero.
Consideró que puede deberse a un factor calendario o estacional, debido a que el jueves y viernes de la Semana Santa de 2024 tuvo lugar en la última semana hábil del mes de marzo. Esto pudo ocasionar que en esa semana algunas personas no enviaran dinero a sus familiares, por las dificultades para cobrarlas en los países de origen. Esto sugeriría que no hubo afectaciones estructurales en el flujo de remesas a la región, sino simplemente parte de las remesas se trasladarían para ser cobradas y contabilizadas en los primeros días de abril.
No obstante, una segunda hipótesis sobre la desaceleración reciente de las remesas a la región podría explicarse por una cuestión estructural, en el que la economía de Estados Unidos (principal país de destino de la migración de la mayoría de los países de la región) ya estaría llegando a un nivel en el cual es menos fácil absorber a la fuerza de trabajo migrante y un escenario de desaceleración económica.
Esto debido al importante flujo de migración y de refugiados que ha recibido ese país desde finales de 2020 y hasta la fecha. En promedio, en 2023 y lo que va de 2024, se han registrado mensualmente más de 200 mil aprehensiones e inadmisiones de migrantes en la frontera sur de Estados Unidos.
Adicionalmente, el sector industrial en México, dominado por las manufacturas, acumulan dos trimestres con contracciones (4T23 y 1T24), explicado en parte por una menor demanda de bienes duraderos en Estados Unidos.