La rectora de la BUAP, Lilia Cedillo, reconoció el esfuerzo que significó el trabajo docente durante los dos años de confinamiento por COVID-19 y dijo que para el maestro representó redoblar esfuerzos, hacer uso del ingenio para seguir dando clases y el gran reto de mantener atentos a los estudiantes y asegurar su aprendizaje.