UBS en su informe "TechGPT: IA generativa y sus implicaciones macroeconómicas", estimó que si bien el aumento de la eficiencia puede traducirse en mayores ganancias corporativas, los economistas esperan que parte de esos beneficios se pierdan en la competencia, lo que llevaría a una disminución de la inflación.  

Las implicaciones de la Inteligencia Artificial (IA) para el crecimiento económico son menos claras, y su impacto en el crecimiento del PIB sigue siendo incierto, advierte el análisis realizado por expertos en estrategias de inversión, destaca un punto relevante acerca de la IA y el empleo.

UBS refiere es incorrecto suponer que todo cambio tecnológico reduce los puestos de trabajo, por el contrario, sugiere que la IA provocará la pérdida de algunos empleos, al tiempo que creará otros nuevos: "Aproximadamente el 10 por ciento de las funciones laborales existentes al final de cualquier década no existían al comienzo de la misma, lo que indica nuevas oportunidades creadas por la tecnología".

Otro impacto de introducir IA en la economía es que podría mejorar la productividad, pero ello exigiría un replanteamiento de los modelos de negocios, no sólo un ajuste de las prácticas existentes para adaptarlas.

En el ámbito geopolítico es probable que la IA provoque disrupciones en la economía y cree tensiones sociales y una mayor escalada de las tensiones geopolíticas, como demuestran recientes prohibiciones realizadas por Estados Unidos y otras medidas de represalia por parte de China.

"Algunos empleos se vuelven más valiosos, mientras que otros quedarán obsoletos. Por ello, los periodos de agitación económica suelen crear tensiones sociales. Los grupos que disfrutan de estatus e ingresos crecientes no se oponen a los cambios, pero los que ven cómo sus ingresos y su estatus disminuyen buscan culpar a alguien", aseveró.