Los ingresos tributarios representaron casi dos tercios (el 64.2%) de los ingresos totales del sector público en 2023 al alcanzar los 4.52 billones de pesos, conforme análisis del IMCO, los cuales ubican al IEPS como el gravamen estatal con crecimientos del 258.9 por ciento en términos reales, es decir, ya descontada la inflación.

La captación de ingresos tributarios fue 12.4% mayor, en términos reales, a la observada en 2022 (3.81 billones de pesos) y 14.4% superior a la reportada en 2018, al inicio del sexenio, cuando sumó alrededor de 3.06 billones de pesos.

En ese contexto el impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS) tuvo un incremento real de 258.9%: pasó de 117.5 mil millones de pesos en 2022 a 445.1 mil millones en 2023 (es decir, creció en 327.6 mil millones).

Este crecimiento se atribuye al comportamiento del IEPS gasolinas y diésel, que pasó de -79 mil 200 millones en 2022 a 230.1 mil millones de pesos en 2023 como resultado de la reducción de los estímulos fiscales aplicables a los combustibles automotrices.

El IEPS a gasolinas incluso permitió compensar en parte la caída de los ingresos petroleros del -31.0% en términos reales con respecto a los obtenidos en 2022, luego que pasaron de 1.48 billones de pesos a 1.08 billones de pesos en 2023 como consecuencia, principalmente, de la reducción del precio promedio de la mezcla mexicana de petróleo crudo de exportación (de 89 a 71 dólares por barril) y la apreciación del tipo de cambio (de 20.1 a 17.8 pesos por dólar) entre esos años.